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lunes, 31 de julio de 2017

En un sueño





He salido de casa abrochándome el alma hasta el último botón, para no perder una sola gota de tu esencia anidada en mi piel.
Hacía mucho que no venías a verme, y casi había olvidado el color de tus ojos, tu sonrisa, tus besos frescos de hombre recién estrenado.
Me has hablado dulce, mezclándote conmigo, mirando nuestra imagen en el espejo, devolviéndome por un instante la juventud perdida.
Se han fundido los versos en los labios sin proferir preguntas, (no había tiempo para ello), y un estremecimiento me ha traído de vuelta, disolviendo tu imagen en miles de cristales rotos.

No ha habido despedida, (nunca la hubo).

Seguirás por siempre en un rinconcito de mi memoria. Despertando la vida que cabe en un sueño.





6 comentarios:

  1. Hay que tener rincones donde guardar estos instantes, para poder acudir a ellos, en tiempos de penurias emotivas.
    Un saludo.

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    1. Si, hay otra vida oculta tras los párpados cerrados, que de vez en cuando es bálsamo de tristezas.

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  2. Respuestas
    1. Si, pero pensar estos momentos te dibujan la sonrisa. Un abrazo.

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